sábado, 23 de enero de 2016

Concurso Literario de la EP N° 13 “Llegó la hora de escribir un cuento” Mención Especial del jurado “El misterio del monte” por integrantes del grupo de 2° ciclo de la Escuela Especial N° 501: Kravacek, Carina Milagros; Solar, Luna; Baigorria, Damián; Riccillo, Jesús; Torrez, Agustín; Rocha, Alberto y Vismara, Miguel

    En un pueblo pequeño, alejado de los ruidos. sucedían hechos extraños que intrigaban a la gente del lugar.
    Una mañana un granjero descubre  a varios de sus animales muertos con extrañas marcas en sus cuerpos.
Viendo esto, decide hacer la denuncia y se dirige a la comisaría del lugar.  al llegar, ¡Oh, sorpresa! estaba todo el pueblo reunido y aterrorizado.
    A algunos les desaparecen cosas,  otros encuentran animales muertos, otros escuchan el lamento de la llorona, otros el aullido del lobo… ¿qué es lo que está pasando?
persona entendida, el granjero, asegura que las marcas que tienen los animales son de colmillos, lo que hace sospechar que se trata del lobo.
    Si… Si… ¡Es el lobo! Entonces, el pueblo se organiza y deciden que cuando oscurezca saldrán en su búsqueda.
    Unos dicen haberlo visto camino al monte, otros, tomando agua en el arroyo, otros, merodeando la granja de don Damián, otros, aullando en el cerro a la luz de la luna.
llegó la noche y enfurecidos, buscan palos, hachas, escopetas, trampas y salen a buscarlo. en el monte encuentran huellas y el granjero experto las identifica. ¡si! son las del lobo. entonces, siguen su rastro.
    Caminan, caminan, cruzan arroyos, escuchan a la llorona, escuchan aullidos, una lechuza curiosa desde lo alto de un árbol parece anunciar algo y un cuervo revolotea sobre ellos.
    Todos temblaban de miedo y no se animaban a avanzar. cuando de repente… detrás de una roca escuchan lamentos de un animal y cuando se acercan ¡Oh, noooo! que esto, Dios mío, es el lobo que está agonizando. tiene  heridas similares a las de los otros animales. entonces… ¿quién fue?
    Están todos desorientados y muertos de miedo cuando escuchan el llanto desesperado de la llorona que parece decirles algo. siguiendo el llanto, encuentran una escuela abandonada cubierta de vegetación, telas de arañas, ratas y el llanto de la llorona mas fuerte que nunca. nadie se animaba a entrar, hasta que Agustín, el hijo de don Damián dijo: ¡yo me animo! Abre la puerta y el resto lo sigue. buscan por aquí, buscan por allá y nada. Hasta que descubren una puerta secreta que llevaba a un sótano. bajaron alumbrándose con antorchas y vieron algo que les heló la sangre… un ataúd y dentro de él para sorpresa de todos… se hallaban los objetos desaparecidos, orejas de animales, colas, patas y manchas de sangre. luego de ver todo esto se dieron cuenta de quien era el verdadero responsable de todos los hechos que sucedían en el pueblo.
    ¿Y ahora qué?
Continuará...

Lo que queda Por Héctor Berenguer

El cuerpo me mira
y se lleva un cuerpo que no es.
Se lleva mi ausencia
como si fuera su alma.
Lo que queda
también es parte de lo que se va.
Nada mira quien todo lo ve,
lo que no ve su frente
lo ve su espalda.
La poesía conoce tus lágrimas
pero no las seca.
Lo que queda o nos deja
es ir muriendo en otros.
La ausencia nunca se lleva nada de importancia…
Se lleva lo que dejó la vida.

Ola muerta Por Antonio Monzonís Guillén-España

Volví,
y bajé a tu lado,
vi tu sonrisa,
besé tus labios,
te llevé
sobre mi espalda.

Mis pies descalzos
hollaban
la arena de la playa.

Jugamos,
seguías sonriendo,
como yo.

Una ola muerta
rozó mis pies.

Sí,
no era un ser humano
Era
la revolución de una elipse
alrededor de tu cuerpo.

Poema Por Mayte Sánchez Sempered- España

De los caminos vacantes
el verso
se adentra cómodo en los más pintorescos
caminos puta alegre
caminos borrachera
caminos libertad para los gatos

quedan sin retratar
esposas de cuneta,
analgésicos para llevar el día,
viejas peluca con las cejas pintadas
y nostalgias de Cuba
en un barrio de nadie

y el verso se desliza
debajo de las muelas
semilla entre el escombro
suburbial y maldito
donde no hay ateneos ni vanguardias ni luces
y grita "soy de ellos".

En el parque,
paseando entre los perros,
el verso muerde la pierna de un anciano
"Te amo ahora
como te quise siempre"
(lápiz gastado sobre hoja de cuadros).

El poeta centrípeto despierta
con el verso pegado a las pestañas
y se lava la cara y se sube a la silla
y declama
"escuchadme
yo soy la poesía".

Una chica gitana sacude la melena
y el verso abandona la boca del poeta
para enredarse
ciego
en la ropa tendida.

CASI CHISTES (PARA REFLEXIONAR CON HUMOR) Para Oscar, que le gustan las reflexiones

El maestro le dice, incomodado, al pibe:
- ¡ Eres un torpe ! ¡ Un borrico! ¿ Sabes lo que hay que hacer con un burro para que no sea estúpido?
- Sí, señor - responde el pibe.- Darle de comer más y pegarle menos.


- ¡ Más te valiera pedir educación y no limosna - le dice un caballero a un chico pordiosero.
- Señor... Yo le pedí a usted lo que creí que le sobraba. ..


- Mamá, quiero ver lo que hay en esa caja.
- En esa caja no hay nada.
- Pues entonces quiero ver lo que no hay en la caja.

El amanecer Por JULIO CARLOS DÍAZ USANDIVARAS

Voy caminando en el agua, pura
como las piedras que lava la eternidad.
Una flor, una voz que siembra
lámparas en la brisa
-vidalitá-
llega conmigo.

Yo soy el payador, oídme, el dueño de los pájaros
y el vino.
Mi garganta amanece después de cada sombra
como una vara de profecía,
porque traigo la sangre guardada entre la música
y esta carta fragante de la tierra
para tocar tu frente.

El trapecio del bosque defiende los espejos
del trebolar que se bebió la noche
y ahora festeja el círculo principal y encendido.
En el hombro desnudo del cielo
los colores estrenan su júbilo apremiante
 - oh cuerpo azul, suave estación, bandera -
y el álamo protege su temporal vigencia de tacuara.

Voy caminando en la tierra parda
y en el espacio del chingolo
El árbol despertó sus frutales espuelas;
la punta de una rama
va quebrando el último azufre de la niebla
y mi sangre desata sus gauchas anteriores.

Una guitarra sola, para mi vez antigua de metales.
Una guitarra sola
y   herida en este pulso de ceibal circulante.
y todo el país del viento derramado en mi boca,
porque voy libre y cantando
en el estribo entero de la patria.

ALEGRÍA Por Tomás M. Cuenca

Corazón, responde,
que te habla una vida,
Contéstame presto,
Dime sin porfía...
Responde...  ¿Tú sabes
lo que es alegría?

Yo sé hacerme cargo
de que antes sufrías
de tus desengaños...
Pero hoy...   Sin mentira.
Responde...  ¿Tú sabes
lo que es alegría?

Hoy la has visto cerca,
tu latir sentía,
sentía tu llanto...
y se  conmovía...
Responde... ¿Tú sabes
lo que es alegría?

Sólo una esperanza
y curó tu herida.
Hoy ya estás alegre.
Te explicas la vida.
¡No lloras!...  ¡Ya sabes
lo que es alegría!

COPLAS Y CANTARES - Por NÉSTOR W. VEGA

1
Mi corazón era antaño 
cascada de polvo fino; 
de tanto rodar se ha vuelto 
dura piedra de molino.

2
Se me ha perdido una copla. 
A quien le salga al encuentro, 
se lo gratificará 
con la pena que hay adentro.

3
No hay como la libertad, 
pero no la de los menos; 
yo digo la de los más:
dime si nos entendemos.

4
Enciérrame en una cárcel 
y dame una buena copla: 
saldré por la puerta grande 
y aunque se oponga la tropa.

5
El que tenga una rosa 
que no la esconda;
la rosa es de la rosa 
y es de la ronda.
6
No se debe reprochar 
lo que del diablo comento; 
yo he visto al diablo rezar 
y que me cuelguen si miento.

7
Se viene al mundo llorando 
y se vive padeciendo, 
pero se muere rogando 
vida que seguir viviendo.

8
Lo digo porque lo digo, 
porque se me da la gana: 
aquí en medio de la vida 
suelto mi copla campana.

9
Digo lo que soy. No niego
-ni creo haberlo negado- 
ser hacha, paloma y fuego 
y hombre por cada costado.